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Julia Haro | 20 December, 2020

La relevancia del color en el branding

"Si quieres que algo muera, mantenlo quieto" - J. Drexler

Todos los días estamos rodeados de una gran cantidad de estímulos visuales y una gran variedad de marcas que nos ofrecen varias opciones para cualquier producto que busquemos, haciendo que la competencia entre ellas sea muy feroz. Dado que el 99.7% de las empresas en México se encuentran en una etapa inicial, es necesario que los negocios comprendan la importancia de contar con una identidad fuerte y una personalidad única que los haga destacar entre la multitud de competidores.

El branding toma en cuenta diferentes elementos que dan forma y personalidad a un nuevo negocio. El color es uno de ellos y una oportunidad crucial para establecer una identidad fuerte y comunicar una esencia de marca y unos valores fundamentales definidos. Los expertos en color afirman que es el primer atributo de una marca que nuestro cerebro procesa por encima de las formas y las letras. Cuando pensamos en marcas como Coca Cola, Ikea, Best Buy, McDonalds o Starbucks, lo primero que identificamos y recordamos es su color, mientras que los detalles o la tipografía del logotipo pueden no ser evidentes o no estar bien definidos.

El uso del color ayuda a comunicar la naturaleza de su negocio y contribuye a la identificación de la personalidad de su marca. Mientras que la especialización hará que su público recuerde su producto o servicio, el color sirve como un fuerte diferenciador de la competencia que realmente hace que una marca destaque.

Las investigaciones demuestran que relacionamos las marcas con rasgos humanos como la calidez, la sofisticación y la amabilidad, lo que produce fuertes conexiones emocionales. Parece bastante lógico pensar que atribuimos atributos familiares a las marcas para sentirnos relacionados con ellas o alejados de ellas según nuestra personalidad. Los antecedentes culturales y las experiencias personales también desempeñan un papel importante en la psicología del color, ya que relacionamos el color con diferentes emociones. Por ejemplo, cuando pensamos en una heladería o en un bufete de abogados, la paleta de colores que nos viene a la mente es completamente distinta. La heladería puede evocar sentimientos de amabilidad y alegría e incluso recuerdos de la infancia, por lo que tendrá sentido tener una identidad de marca llena de colores vibrantes y contraste. Por otro lado, se sabe que la mayoría de los bufetes de abogados son muy formales y de confianza y que los abogados llevan trajes oscuros a diario, por lo que será difícil relacionarlos con colores llamativos o vibrantes, así que pensaremos en una paleta de colores monocromática, más oscura y sencilla.

La construcción de una identidad de marca maneja muchos factores sin embargo es importante considerar el color como una característica notoria a tener en cuenta.

por @jules_hr